Además, el Papa pidió la liberación de los rehenes, un alto al fuego definitivo, el acceso seguro de ayuda humanitaria y el cumplimiento del Derecho Internacional Humanitario.
El ataque contra el hospital en Gaza refleja la sistemática violencia contra periodistas, en el contexto del genocidio perpetrado por Israel que ya ha dejado más de 240 víctimas.
La ONU reportó más de 1.700 muertes en la Franja de Gaza desde mayo, muchas ocurridas mientras las víctimas buscaban ayuda humanitaria en puntos y acciones deliberadas del ejército de Israel.