Presidente Gustavo Petro se reunió con la familia del pescador presuntamente asesinado por un misil en el Caribe colombiano

El mandatario compartió un encuentro con la esposa e hijos de Alejandro Carranza, víctima del ataque en aguas posiblemente territoriales. “No son narcotraficantes ni terroristas”, afirmó.
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Presidente Petro.
Foto: El presidente reiteró que se trata de familias humildes y que el Gobierno no permitirá que hechos de esa naturaleza se repitan en el país. / Presidencia de la República.

El presidente Gustavo Petro se reunió este viernes con la familia del pescador Alejandro Carranza, presuntamente asesinado por el impacto de un misil en el mar Caribe, en territorio de la Guajira. El jefe de Estado publicó en la red social X una fotografía junto a la compañera e hijos de Carranza, y expresó su rechazo a las versiones que justifican los ataques militares estadounidenses en el Caribe.

Con la familia, hijos, compañera, del pescador Alejandro Carranza, asesinado con un misil cerca a Santa Marta, Colombia. Una familia muy pobre, que vive en el barrio más pobre de Santa Marta. No son ni terroristas ni narcotraficantes. Rubio y Trump están completamente equivocados”, escribió el mandatario.

La imagen, tomada durante el encuentro, muestra al Presidente conversando con los familiares donde escuchó de primera mano las afectaciones y les ofreció acompañamiento institucional.

El caso Carranza y la denuncia por ejecuciones extrajudiciales

Carranza desapareció el 14 de septiembre, cuando salió a pescar con otros hombres de la zona norte del país. Su familia, residente en un barrio popular de Santa Marta, rompió el silencio después de conocer los reportes sobre bombardeos realizados por fuerzas estadounidenses.

La esposa del pescador, Katherin, y su hija Zaira aseguran que Carranza no tenía vínculos con el narcotráfico, y que se ganaba la vida en faenas de pesca artesanal. “Era un ser humano, un padre que trabajaba para sus hijos”, afirmó una de sus familiares en declaraciones anteriores a RTVC Noticias.

Defensores de derechos humanos y organizaciones civiles han advertido que los ataques en el Caribe, en los que han muerto más de 60 personas, podrían constituir ejecuciones extrajudiciales.

Contexto internacional de los ataques

La Associated Press reveló esta semana que las operaciones ordenadas por el expresidente Donald Trump en el mar Caribe se realizaron bajo la narrativa de atacar embarcaciones de narcoterroristas, pero que muchas de las víctimas eran pescadores y trabajadores informales de las costas de Venezuela y Colombia.

El gobierno estadounidense justificó las acciones argumentando un combate directo contra el narcotráfico. Sin embargo, varios organismos y congresistas norteamericanos han pedido una investigación sobre el uso de fuerza letal fuera de zonas de conflicto armado.

Las declaraciones del presidente Petro contrastan con las posturas del expresidente Trump y Marco Rubio, quienes han defendido públicamente las operaciones.

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El llamado del presidente Petro a la justicia internacional

El presidente Gustavo Petro ha insistido en exigir evidencia de que las embarcaciones bombardeadas transportaban drogas. Asimismo, ha hecho un llamado internacional para detener la masacre de civiles por parte del poderío militar estadounidense desplegado en la zona, que viola el derecho a la vida y al debido proceso en este tipo de situaciones.

El presidente reiteró que se trata de familias humildes y que el Gobierno no permitirá que hechos de esa naturaleza se repitan en el país.

El encuentro demuestra la voluntad del Gobierno de poner rostro humano a las víctimas invisibilizadas del Caribe y de exigir responsabilidades por el uso desproporcionado de la fuerza.

Mientras avanza la denuncia internacional, el caso de Carranza se ha convertido en símbolo del reclamo de justicia para los pescadores del litoral, quienes hoy exigen ser vistos como trabajadores del mar, no como objetivos militares. Son comunidades pobres que hoy no salen a trabajar porque tienen miedo de ser asesinadas.